miércoles, 30 de marzo de 2011

Amargo

Ese gustito agridulce que tanto quería saborear, hoy en quince minutos se volvió tan amargo que tuve que escupirlo. Lo bueno dura poco y se hace desear.
¿Qué paso? ¿Qué salió mal? ¿Tan complicado es darle un gusto al paladar? Tanto tiempo esperando ese sabor y hoy, en pocos minutos la garganta me pedía a gritos escupir lo que estaba ingiriendo. Creo que abuse del buen sabor, del bienestar y del corto tiempo que dura lo agridulce.
Ahora, el amargo me destruye, saca lo peor de mi, me transforma...El malestar que siento me obliga a responder erróneamente. ¿Por qué? ¿Por qué siempre lo bueno dura tan poco? No lo sé. No sé como manejar mi cuerpo teniendo este sabor dentro mio, no sé como manejarme. Cierro los ojos, trato de concentrarme en otra cosa que no se refiera a la molestia que siento. Trato de meter en mi cabeza que lo amargo siempre está, solo que no lo vemos. Cuando probas lo agridulce no queres despegarte del sabor nunca más, solo queres que tu paladar saboree eso y nada más. Pero, nada es para siempre, y todo llega a su fin. Ese corto lapso entre lo dulce y lo agridulce terminó, ahora llegó el gusto amargo e hiriente, el que no cualquiera puede probar. Yo, sin querer, lo deje entrar en mí. Ahora, con un poco más de experiencia, estoy más segura que nunca, que lo agridulce fue el mejor sabor que deje entrar por mis labios, meterse por mi garganta y llegar a mi corazón, para así, permanecer en él el tiempo que sea necesario. El tiempo de la felicidad, de lo agridulce.

martes, 29 de marzo de 2011

Agridulce

Estoy muy asustada. Asustada por no poder controlar mis pensamientos. Porque es la verdad, en el único momento en el que no somos dueños de nuestra mente es cuando cerramos los ojos, soñamos y vamos más allá de lo coherente. Tengo miedo de ahora volver a cerrar los ojos y que mi mente procese cosas que me obliguen a despertar con el corazón en la boca. Tengo miedo de perder el control para siempre...
Ahora, en este momento, me importa mucho y poco lo que procese mi mente, lo que imagine o piense. Por fin, luego de tantos meses estoy empezando a sentirle el gustito agridulce a la felicidad. De a poco voy ingiriendo en mis pulmones la brisa de verano, más allá que estemos empezando el otoño. Y con el paso de los días, mi sonrisa se vuelve más verdadera y notable que semanas atrás.
Me estoy empezando a sentir nuevamente completa. Sin susurros que me atormenten ni silencios que me incomoden. Solo un poco de mi.
Gracias a todo mi alrededor, con la presencia y ausencia de algunos, vuelvo a ser yo. Tan sencillo y complejo a la vez...

domingo, 27 de marzo de 2011

Querer es poder.

¿Qué se siente cuando no se siente nada?
Un enorme vacío, ni triste ni feliz...nada. Un nudo en la garganta, queres gritar, expulsar todo lo que tenes adentro, queres liberarte...pero sentís que es el momento menos indicado para hacerlo. Queres producir sonrisas y transformar tristezas, pero no encontras el fin de todo esto. Queres salir y toparte con la luz del sol en tu rostro, queres sentir el frío de la brisa de otoño. Queres sentir que el mundo fue creado única y especialmente para vos, pero te ves tan diminuto e inocente que no te das el gusto de pensar eso. Queres dar a conocer tu opinión, expresarla y discutirla, pero tanto miedo es el que tenes dentro tuyo que no te sale la voz a la hora de hablar.
Gritas, gritas, pero no emitís ningún sonido.
Sentís tanto y demostras tan poco. Sos un gigante y no pasas el metro sesenta. Queres salir de tu burbuja, queres sentir y si es posible comentarlo en todos los diarios y revistas. Queres destacar y ser respetado, queres correr, saltar y bailar, pero tus pies no te lo permiten...no se mueven, no te llevan.
Queres y no podes.

sábado, 26 de marzo de 2011

Lo más grande y a la vez, lo más chico.

Nuestro sol, ¿Es realmente nuestro? ¿Nos ayuda tanto como pensamos?
Por ejemplo, cuando tenes tanto frío que ya no hay campera que te abrigue ¿Que haces? Caminas por la vereda del sol. Exactamente, caminas por la vereda del sol. En cambio, cuando sentís un calor sofocante y lo único que pedís es un poco de sombra, el mismo sol se encarga de no dártelo.
Es y no es.
Solo acerco mi vista hacia el sol y descubro lo poderoso y destructor que puede llegar a ser.

domingo, 6 de marzo de 2011

Miedo (2 años atrás)

En serio me gustaría hablar. No solo hablar, sino también comentar, y en ese momento, recapacitar y/o entender. No es nada fácil estar acá sentada, enfrentándome conmigo misma, sin saber nada, o todo lo contrario, saber todo…pero el miedo…es el miedo de escuchar, el miedo de aceptar, de ver. Es el miedo, el que no me deja tranquila. El terror de no ver lo que yo quiero ver.

Encontré este escrito en un cuaderno viejisimo. Bueno...dos años. Ahora que lo leo, me acuerdo perfectamente lo que sentía. Tal cual lo describí, tenía miedo de saber mucho más de lo que tenía que saber. Tenía miedo que mis especulaciones fueran una realidad, y nada... tenía miedo de sufrir. Es increíble, ver como en ese tiempo llevaba tanta inocencia sobre el tema. ¿Y ahora? Ahora pido; Ojala me hubiera dado cuenta antes de las cosas. Pero bueno, creo que todo pasa por algo y también pienso que vinimos al mundo con una función. Así que, si supe del tema tan tarde fue por algo. La verdad, no tengo que más insultos/palabras decir y que más lagrimas llorar, solo un par de risas que regalar y si es posible, un par de libros para leer. Besos!

viernes, 4 de marzo de 2011

Equivocados estamos, al pensar que nunca más vamos a volver a ver salir el sol...


Estamos equivocados cuando pensamos que perdemos todo, cuando sentimos que el mundo se nos acaba, cuando no encontramos que más aire respirar. Estamos en algo erróneo cuando nos sentimos solos, cuando sabemos que nadie en esta tierra se importa por nosotros… no es verdad.
Nosotros, nosotros le damos nuestro lado dramático a las cosas. Nuestro mundo nunca se nos va a acabar, no por acción de humanos, nunca nos vamos a encontrar sin aire que respirar, nunca vamos a estar solos.
¿Qué podemos hacer? ¿Qué hacer cuando sentís ganas de dormirte y no despertarte nunca más? ¿Qué pensar cuando el mundo esta en tu contra? ¿Cómo vivir con una angustia tan grande? ¿Cómo seguir inhalando oxigeno si sabemos que lo va a venir, no es nada bueno? ¿Cómo hacemos? ¿Cómo actuamos?
Permanecer en nuestro lugar, ¿ayuda? ¿Estamos en lo correcto si solo nos atinamos a sentarnos, cruzar los brazos y mirar hacia delante?
Sinceramente no tengo la respuesta, no sé que esta bien y que esta mal. Solo se que mi mundo perdió el color y la risa. Pero, sin  darme cuenta, después de esta gran tormenta, salió el sol que tanta falta me hizo.

jueves, 3 de marzo de 2011

Llorar. Cuando y como quiera.

Teniendo todo mi mundo al revés, encontrándome en medio de personas desconocidas. Con ojos cansados pero ni una gota de sueño. ¿A quién tengo que dirigirme? O mejor dicho, ¿A quién tengo que dirigir todo lo que expreso en pequeñas letras? Quiero sentir algo diferente, el mismo sentimiento ya aburre. No porque no sea entretenido, sino porque ya conozco la historia de principio a fin.
Se que mis lágrimas no van a tomar protagonismo en esta historia, porque, por así decirlo, nadie las vio participar.
Me voy a cagar de la risa, voy a gritar por todos lados y si quiero y si me da la gana voy a llorar como nunca lloré en mi vida. También voy a gritar muchas palabras feas, voy a mandar a algunas personas a dar una vuelta, me voy a reír, me voy a burlar, voy a peinarme un poco, voy a correr y si quiero y si me da la gana voy a llorar como nunca lloré en mi vida. Después voy a pedir perdón, voy a volver a putear, voy a darle de comer a mis animales, voy a volver a gritar, voy callar a un par de individuos que no sirven para nada, voy a tomar mucho café y si quiero y si me da la gana voy a llorar como nunca lloré en mi vida. Por ahora, solo quiero escribir, gritar un rato, y más tarde, cuando quiera y cuando se me de la gana, voy a llorar como nunca lloré en mi vida. Una vez más